6 de cada 10 mujeres son maltratadas en Ecuador
En la sala de espera de la Unidad Especializada de Violencia contra la
Mujer y la Familia de Portoviejo, “Juana” (nombre protegido) tiene la mirada
perdida. Se cansó de ser maltratada y acudió a denunciar al esposo.
“Juana”, de 29 años de edad, prefiere no dar la cara. Cuenta
que lleva 12 años de matrimonio, pero durante 8 de ellos,
quien le juró amor eterno la ha maltratado física y
psicológicamente.
Durante todo ese tiempo prefirió callar. La intención era salvar
el matrimonio, pero “Juana” no se había dado cuenta que eso estaba afectando
a sus dos hijos.
En su caso, el esposo está cerca de graduarse de abogado.
“Me cansé de los maltratos y por eso lo denuncié”, indica.
En la misma sala estaba Mayra Mera García. Ella es maestra. Tiene
un hijo producto de un primer compromiso. Desde hace 4
años tiene una unión libre, pero dos de ellos ha sufrido maltratos.
Hace un año lo denunció en ese entonces en la Comisaría
de la Mujer y la Familia, pero se dejó convencer y volvió con su
pareja, pensando que la situación iba a cambiar lo que no fue así.
Ahora decidió separarse, pero continúa siendo acosada y
amenazada por su conviviente. “Ha llegado a lanzarme piedras a mi
casa”, indica.
Cifras. Hoy se recuerda el Día Internacional de la Eliminación de
la Violencia contra la Mujer, y los casos de “Juana” y Mayra Mera
García, quienes viven en Portoviejo, no son los únicos en
Ecuador.
Desde julio del presente año que iniciaron sus funciones las Unidades
Especializadas de Violencia contra la Mujer y la Familia, en Manabí se
han presentado 1.482 denuncias.
Manta con 645 casos lidera las cifras, le sigue Portoviejo con 596, Chone
con 238 y Pichincha con 3 casos.
En Ecuador 6 de cada 10 mujeres con edades entre los 15
y 49 años, han vivido algún tipo de violencia de género, según la
encuesta nacional de relaciones familiares y violencia de género contra las
mujeres, que publicó en el 2012 el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Inec).
Katty Macías, jueza de la Unidad Especializada de Violencia contra la
Mujer de Portoviejo, indica que en los últimos años han existido cambios y ahora
las damas ya no callan.
“La violencia intrafamiliar se sanciona. No se concilia no
se transa bajo ninguna circunstancia”, señala Macías y agrega que una vez que
se presente la denuncia, después de seguir el debido proceso,
el agresor es sancionado.
El Código Penal establece sanciones de dos a 4 días de
prisión y multa de 7 a 14 dólares por violencia psicológica. También de 5
a 30 días de prisión y multa de 14 a 28 dólares por violencia
física.
Sin embargo, Macías, indica que cuando hay reincidencia, los casos son
enviados a la fiscalía y el agresorpuede ser sancionado con prisión de 6
meses a un año.
Representantes de la organización de defensa de la mujer María Guare, y
del colectivo Nosotras, consideran que todavía faltan normas que ayuden a
erradicar este problema social.
Señalan que en el Código Orgánico Integral Penal, que
actualmente se debate en la Asamblea, se instituyen normas que no favorecen ni
viabilizan un apoyo directo para que los jueces no sólo atiendan las
contravenciones, sino todos los tipos de violencia contra la mujer.
Afecta. Tamara Toro, psicóloga clínica de la Unidad Especializada de Violencia
contra la Mujer y la Familia,considera que toda violencia física va
a tener violencia psicológica.
Agrega que se debe ir desterrando los estereotipos familiares, donde
se piensa que la mujer debe soportar todo lo que el
esposo haga. “Una de las causantes de la violencia es el
machismo”, indica.
